Murallas de sonido para no sucumbir en tu maremagnum vital: Ceremony

Recuerdo con nostalgia aquella época de mi vida en la que el walkman era un apéndice más de mi cuerpo. A través de él llegaron grandes canciones y discos a ese sentido y no localizado lugar que debe habitar entre el corazón y el cerebro. Los Jesus and Mary Chain debutaron en mi vida con una cinta en la que estaba grabado Honey’s dead. Es difícil describir la inefable sensación que las catárticas guitarras de reverence ,teengage of lust o almost gold dejaron en mis advenedizos oídos a través de los auriculares.

No sé cómo fue la primera vez de los miembros de Ceremony con los hermanos Reid, pero lo que sí puedo asegurar es que les marcó tanto como a mí, a tenor de lo que expresan en sus canciones. El ruido como vía de escape y exorcismo de todas las angustias vitales. Guitarras poderosas que esconden melodías angustiadas, pero llenas de emoción. Todo ello agitado con las baterías bailables del sonido Manchester, como en el disco arriba citado.

You never stay (la canción del video) y Never loved again (http://www.myspace.com/ceremonytheband) podrían pasar perfectamente por una resurrección más que estimulante de los de Glasgow: sencillamente son abrasadoras.





En Cold cold night demuestran que también han escuchado a New order, y, como los infravalorados Vitesse, impregnan el legado de los mancunianos de un aire sombrío y una guitarra hiriente, dando lugar a una gema de pop oscuro.