Desde los sótanos de las Colinas británicas III: Felt-El aliento de la melodía solitaria

Felt es el clásico grupo que aparece de cuando en cuando en las distintas reseñas musicales del mundo indie y que siempre había despertado curiosidad en mí. No obstante, no fue hasta que Cherry Red reeditó sus discos en el 2003 (que provocó alguna revisión en la prensa especializada), cuando empecé a sumergirme en el idiosincrásico universo del grupo Lawrence Hayward, cantante, guitarrista y compositor.

Los británicos no son un grupo inmediato ni todas sus canciones tienen la misma capacidad de enamorarte por lo que no es baladí por dónde se empieza. Yo tuve la suerte de hacerlo con el favorito de la crítica (Forever breathes the lonely Word-1986), que a la postre acabaría siendo también el mío. Una vez que descubres que la voz perezosa, que recita más que canta (a lo Lou Reed), de Lawrence no está exenta de momentos de gran clase y elegancia melódica o que ese órgano de fondo le da un color superlativo a las preciosas guitarras cercanas a las de Tom Verlaine de Television (de cuya Venus sacaron el nombre del grupo), sus canciones se convierten en algo adictivo. Pop minimalista para oídos acostumbrados al caviar sonoro.

Dejo aquí mis cuatro favoritas: Down but not yeto ut y A wave crashed on the rocks (que sospecho Gabinete Caligari ha escuchado más de una vez)de Forever breathes the lonely Word y esos dos singles ganadores en los chart de grupos perdedores que son Penelpoe tree y Trails of color dissolve. Enormes canciones que les deberían hacer ganar adeptos en cada escucha.

Felt-Down But Not Yet Out

Felt-A Wave Crashed on Rocks

Felt - Penelope Tree

Felt - Trails Of Colour Dissolve

Canciones que salvan tu vida: Built to spill-Else vs Velvet Waltz

Siempre que hago referencia a Built to spill, me gusta remarcar que Doug Martsch, cantante, guitarrista y compositor del grupo, es un genio dentro de la música pop. Tras quedar fascinado por como domina las canciones sobre las tablas y saborear su inagotable talento en sus dos últimas entregas (You in Reverse en 2006 y There Is No Enemy en 2009), no creo que sea un buen momento para dejar de hacerlo.

Los de Idaho irrumpieron en 1993 con Ultimate Alternative Wavers, disco en el que Martsch, virtuoso de la guitarra, seguía la estela de J. Mascis en canciones algo caóticas. Sería en There's Nothing Wrong With Love (1994) cuando el grupo comenzaría a pulir su sonido con típicas guitarras del indie americano (pixies o pavement) y melodías que miraban al mejor pop, como en Car (que debería haber sido un himno indie de los 90), Cleo o Twin falls Idaho. Con el posterior Perfect from Now On (1997) dieron un paso de gigante y completaron lo que para muchos es su obra maestra. Con la mirada puesta en los Beatles y guiados por la guitarra imaginativa de Martsch y los arrelgos instrumentales necesarios, el grupo compuso canciones largas y laberínticas donde el camino de partida nunca lleva al destino final, dejando momentos de hermosa psicodelia: Velvet Waltz, donde John Lennon parece soñar con My bloody Valentine, es quizás su cima artística, con ese final de guitarras tan descomunal. En Keep It Like a Secret (1999) volvieron al formato canción en lo que a duración se refiere pero no renunciaron a la mutabilidad sonora conseguida en su anterior trabajo ni a su calidad melódica. Esta será la esencia de su sonido que se ha mantenido tanto en Ancient Melodies of the Future (2001) como en los dos posteriores, trabajos con grandes momentos como Strange, Alarm, Going against your mind, Liar o Planting seeds.

Tengo una conexión especial con Else, ya que, tras reencontrarme con ella en la antesala de un concierto de Hefner y quedar cautivado por su excelencia, me hizo volver a Keep it like a secret: un disco que me gustó en las primeras escuchas pero que dejé aparcado por algún motivo. Sin el brillo del efecto inmediato, el álbum gana enteros según se va degustando, con esas canciones que, capitaneadas por las guitarras mágicas de Martsch y su voz especial, parecen sonar diferentes en cada escucha y que han conseguido coronarlo en mi altar de discos favoritos.

La canción comienza con una guitarra suave y sutil que te va hipnotizando poco a poco mientras la cálida melodía se va apoderando de ti. Sin quererlo, tu mente comienza a seguir el rastro de esos acordes y acaba atrapada en una espiral sonora de la que no quiere salir.

Hit parade

Apenas he escuchado discos del 2011. No ha sido un tema de desinterés sino que he centrado mi atención en trabajos pretéritos. Aún así, algunas canciones me han llamado la atención. Dejo aquí algunas

The fresh & onlys- Keep Telling Everybody Lies

Cuando todavía dura el efecto de esa gran mezcla entre indie y surf del 2010 llamada Play it Strange (con la maravillosa waterfall, que debería haber hecho a Tarantino replantearse una secuela de Pulp fiction), The Fresh & onlys han vuelto con el EP Secret Walls. Canciones más lentas y reposadas, pero que conservan el aroma surf y demuestran que el grupo tiene talento para las melodías.

The Feelies - Nobody Knows

El retorno de los de New Jersey tras 20 años de inactividad arranca con un"Is it too late to do it again?/Or should we wait another 10?”. A tenor de los grandes momentos que nos depara su reciente Here before, más vale tarde que nunca. Vuelven las melodías sobrias, las guitarras líquidas y esas baterías rápidas que suenan tan cálidas. El grupo recupera su sonido atemporal y nos deja canciones vibrantes como Nobody Knows. Welcome back.

The Vaccines - Blow It Up

Todavía no tengo claro sin The Vaccines son el último hype que se irá desvaneciendo con el tiempo o si su disco (What did you expect from the vaccines) mantendrá el empuje de las primeras canciones. Lo único que puedo decir es que el arranque del álbum tiene buenos momentos de pop inmediato y lleno de euforia. Tendré que escucharlo hasta el final.

Cut Copy - Need You Now

Soy consciente de que muchos de los acólitos del excelso In Ghost Colour (2008) le han negado el saludo a este Zonoscope (al contrario que la crítica). Yo no lo he escuchado entero todavía pero la inicial Need you know no sólo me parece una de las canciones del año, sino que creo que New order habrían matado por haber vuelto con ella en sus fallidos retornos recientes.

The Rosebuds- Go Ahead

La primera escucha del retorno de esa extraña (a la par que entrañable) pareja no ha sido lo satisfactoria que esperaba. De cualquier manera, con canciones como Go ahead, donde mantienen la magia de las dos entregas anteriores, el dúo americano me hará volver a escuharlo con fruición a la caza de más melodías ensoñadoras.