sábado, 31 de mayo de 2008
Rompiendo las olas: Miracle fortress – Beach baby vs Poetatster
Los Beach boys hacían canciones pop sencilla pero llenas de hedonismo y vitalidad, para celebrar la conquista de una ola o cómo la brisa acariciaba los bikinis californianos. Sin embargo, también fueron capaces de crear himnos de belleza melancólica, más propicios para ver la puesta del sol en la playa, mientras observas a la chica de tus sueños (posiblemente de la mano de otro más bronceado, musculado o incluso dotado para las artes amatorias). Así llegaría esa obra maestra llamada Pet sounds, disco reverencial y de interminable influencia.
“Tú y yo lo sabíamos”- Seguro que piensa Graham Van Pelt, compositor de los canadienses Miracle fortress, que por lo que atestigua su debut, ha pasado largas horas escuchando el trabajo cumbre de Brian Wilson y sus chicos. Junto con Panda Bear, han sido los alumnos aventajados del Pet sounds, pero mientras que el estadounidense retuerce y esconde las melodías con sus paranoicas mezclas, los canadienses son menos ariscos y más agradecidos con el oído; psicodelia sedante que te envuelve y se apodera de tu mente.
Beach baby empieza con las olas susurrando de fondo, mientras la melodía (tan cercana al wouldn’t it be nice) te va rociando poco a poco hasta atraparte en un auténtico baño de belleza sonora. Anonadado, tu mente sólo se pregunta por qué los recopilatorios del Café del Mar, se dejan fuera gozadas como ésta.
El resto del álbum no tiene desperdicio y su búsqueda continua de la belleza acaba culminando en maravillas como poetaster.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario