sábado, 14 de mayo de 2011
El día que una guitarra eléctrica se clavó en mi corazón: The Chesterfields vs Betty and the werewolves.
En las reseñas actuales, tanto de prensa especializada como de diletantes con ganas de recomendar, se tiende (e incluso abusa) de la referencia a otras bandas para describir o encuadrar el sonido del grupo objeto. Aunque en algunos casos pueda resultar una manera perezosa que elude el uso de símiles o metáforas, también resulta más directa y ayuda a descubrir la fuente del sonido en cuestión.
Hace unos meses topé con la crítica de los británicos Betty and the werewolves en Rockdelux. Aparte de las citas al C86, que siempre despiertan mi inquietud, me llamó la atención que se recomendaba abordar antes un disco de sus paisanos The Chesterfields: Kettle(1987). Me encomendé a los dos y no me arrepiento. ¡Gracias por la recomendacíón!
Betty And The Werewolves debutaron en el 2010 con Tea Time Favourites, un trabajo irregular pero con unas cuantas píldoras de pop pegadizo bañado con la urgencia y velocidad punk que no te dejan indemene. Mi favorita es Should I Go To Glasgow con ese aire Ramoniano (¿Por qué nadie les cita como influencia en el C86 o en los Jesus and Mary Chain?) que envuelve a una melodía lánguida certera.
Sus presuntos maestros, The Chesterfields, pulularon por la périda Albión durante la mitad de los 80 y eso se refleja en su sonido: grandes momentos pop, con unas guitarras aceleradas que se clavan en el corazón, que los fans de Smiths, Housemartins, Orange Juice o Shop Assistants podrían apreciar. Ironías del destino, ya conocía la vibrante Completely & Utterly , ya que la tenía grabada en una cinta perdida. Por suerte, he tenido la oportunidad de redimirme y volverla a recuperar. Junto a la melancólica Ask Johnny Dee, se ha clavado en mi corazón y me he visto obligado a adquirir su recopilatorio: Electric Guitars in Their Hearts. ¡Larga vida al pop británico de los 80!
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2 comentarios:
Si Señor! buen rescate el de los Chesterfields...abrazo!
No sé qué tenía el pop británico de los 80 que sonaba a gloria.
¡Un abrazo, Azul!
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